En el año 1986, ha sido publicado en la revista Pudmed, el articulo científico con el titulo:
The Relationship of Corpus Callosum Connections to Electrical Stimulation Maps of Motor, Supplementary Motor, and the Frontal Eye Fields in Owl Monkeys
Este estudio fue realizado en el departamento de Anatomía en el centro médico de Luisiana en 1986, escrito por Harry J. Gould III profesor de neurología y neurociencias, Gould es el actual presidente del comité “Asesor manejo del dolor” en Louisiana, a hecho publicaciones sobre el deterioro cognitivo, el manejo del dolor, inflamación, anestesia, y sobre conexiones talámicas y del cuerpo calloso.
Objetivo
Gould quiso demostrar una representación diferente de nuestro cuerpo en el cerebro, la organización del movimiento, y la representación de cada movimiento y sus conexiones con la otra mitad del cerebro.
Hipótesis
Pero ¿Con qué intención estudió la corteza cerebral? Él quiso hacer mapas de tres áreas, la corteza motora primaria, fuente principal del movimiento; el área motora suplementaria, encargada de planificar y organizar el movimiento; y el área ocular frontal, la cual determina el movimiento de los ojos.
Explicación de experimento
Para esto, Gould y su equipo utilizaron monos búho, a los cuales se estimuló con micro corriente en distintas zonas de las áreas mencionadas para observar el movimiento que se producía; también utilizaron peroxidasa de rábano picante como medio de contraste para revelar las conexiones con la otra mitad del cerebro a través del cuerpo calloso.
Resultados
Se encontró que la organización del cuerpo en la corteza presentaba una cierta somatotopía pero en su gran mayoría tenía una configuración en mosaico de manera fragmentada, observando hasta 14 representaciones para cada articulación y movimiento. Se observó que estímulos más intensos provocaron respuestas diferentes en la misma representación específica, pudiendo variar desde la velocidad del mismo movimiento hasta presentar un movimiento diferente de una distinta articulación. Esto refiere a que si ya se había identificado la representación de flexión en la articulación de la cadera, al aumentar la intensidad de la corriente podría presentarse un movimiento más rápido, o incluso un movimiento en la articulación del tobillo.
Conclusiones
¿Qué nos revelan estos descubrimientos y por qué es importante para la rehabilitación? Como rehabilitadores nos permite entender que el engrama motor es considerablemente más complejo, pues no sólo es imposible aislar el daño a un solo componente, así se trate de un movimiento, articulación o segmento, sino que todo el cuerpo se verá involucrado tanto en el daño como en la capacidad de recuperación; si hay representaciones intactas podemos utilizarlas de base para reestablecer la función motora, utilizar las conexiones con las otras áreas, así como las de la otra mitad del cerebro para poder recuperar las funciones afectadas. Estas múltiples representaciones y conexiones nos permiten trabajar en la reactivación simultánea de diversos procesos cognitivos, enfocándonos en la representación del movimiento, pero en función de la acción y no de segmentos aislados.